domingo, 22 de junio de 2008
CULTURA CHANCAY
La cultura Chancay
Alberto Tauro del Pino *
Alberto Tauro del Pino *
Es una cultura precolombina que se desarrolló en los valles de Chancay y Huaura. Los hallazgos funerarios en las necrópolis de Ancón y Zepita evidencian una zona de influencia que llegó hasta el cauce norte del valle del Chillón.
Esta cultura florece entre los años 1300 y 1450 d.C. (aproximadamente) luego de lo cual pasan a integrar el imperio incaico.
Su cerámica es una de las más vistosas del Perú prehispánico y refleja heber pasado por dos fases: una, la más antigua, está más cerca del estilo Tiahuanaco-Huari, y se caracteriza por sus vasijas tricolores (rojo, negro, blanco) de diseños geométricos; generalmente se trata de cántaros ovoides con asas laterales que, además de la decoración, ostentan algunas figuras escultóricas; la fase superior está constituida por una cerámica artesanalmente menos elaborada, de arcilla porosa, que usa los colores blanco y marrón oscuro, de forma variada y funcional; pero representa tipos de gran interés desde el punto de vista inocográfico, como la "china", cántaros que figuran personajes con cabezas escultóricas, orejeras, pectoral y vaso, y los "cuchimilcos", que representan a hombres y mujeres desnudos con el sexo bien definido.
Destaca la belleza y variedad de las técnicas de sus textiles, que van desde estupendos tapices hasta finas gasas; las composiciones suelen representar personajes, animales y símbolos; sobresalen las serpientes bifaciales dentadas y las olas del mar. También destacan los mantos de plumas, que consisten en insertar pluma tras pluma a un hilo prinicpal que luego se cose en una tela.
Asimismo llaman mucho la atencióon las muñecas de trapo de esta cultura, a veces formando escenas; su carácter mágico se descubre en su peculiar pintura facial.
* Fuente:
TAURO DEL PINO, Alberto, Enciclopedia Ilustrada del Perú, editorial Peisa, Lima, 2001.
Esta cultura florece entre los años 1300 y 1450 d.C. (aproximadamente) luego de lo cual pasan a integrar el imperio incaico.
Su cerámica es una de las más vistosas del Perú prehispánico y refleja heber pasado por dos fases: una, la más antigua, está más cerca del estilo Tiahuanaco-Huari, y se caracteriza por sus vasijas tricolores (rojo, negro, blanco) de diseños geométricos; generalmente se trata de cántaros ovoides con asas laterales que, además de la decoración, ostentan algunas figuras escultóricas; la fase superior está constituida por una cerámica artesanalmente menos elaborada, de arcilla porosa, que usa los colores blanco y marrón oscuro, de forma variada y funcional; pero representa tipos de gran interés desde el punto de vista inocográfico, como la "china", cántaros que figuran personajes con cabezas escultóricas, orejeras, pectoral y vaso, y los "cuchimilcos", que representan a hombres y mujeres desnudos con el sexo bien definido.
Destaca la belleza y variedad de las técnicas de sus textiles, que van desde estupendos tapices hasta finas gasas; las composiciones suelen representar personajes, animales y símbolos; sobresalen las serpientes bifaciales dentadas y las olas del mar. También destacan los mantos de plumas, que consisten en insertar pluma tras pluma a un hilo prinicpal que luego se cose en una tela.
Asimismo llaman mucho la atencióon las muñecas de trapo de esta cultura, a veces formando escenas; su carácter mágico se descubre en su peculiar pintura facial.
* Fuente:
TAURO DEL PINO, Alberto, Enciclopedia Ilustrada del Perú, editorial Peisa, Lima, 2001.