sábado, 29 de mayo de 2010

LA VIDA DE ADOLFO HITLER

Adolf Hitler Pölzl (1889-1945). Imagen: Revista Time.


La vida de Adolfo Hitler
Autor: Arturo Gómez Alarcón

Adolf Hitler Pölzl nació el 20 de abril de 1889, en Braunau, Austria. Sus padres fueron Alois Hitler y Klara Pölzl, una pareja de clase media.

Infancia y juventud

Cuando era niño su padre lo golpeaba con frecuencia, y esto influyó en su bajo rendimiento escolar. Siempre fue muy aficionado a la lectura de obras de historia y mitología alemana, pero al llegar a la juventud sintió vocación por la pintura. A los 17 años postuló a la Academia de Bellas Artes de Viena, pero no aprobó la evalución de ingreso.

Viviendo en Viena pasó duros problemas económicos, y tuvo que trabajar barriendo nieve, cargando maletas y como obrero de construcción. También se ganó la vida vendiendo sus pinturas.

En 1914, al estallar la Primera Guerra Mundial se presentó voluntariamente al ejército del Imperio Alemán. Peleó hasta 1918, cuando quedó gravemente herido. Quedó muy dolido por la derrota, y con mucho odio por los judíos y los marxistas. Los acusaba de ladrones y traidores. Repugnó el Tratado de Versalles de 1919, por considerarlo demasiado humillante para Alemania.

Incursión en la política

Desde 1920 dedicó su vida al Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán, llamado Partido Nazi, donde lanzaba furibundos discursos contra los judíos y los comunistas. En 1923, Hitler intentó un golpe de estado (Putsch de Múnich) contra el gobierno de General Hans von Seeckt, pero fracasó y fue encarcelado durante 9 meses. Aprovechó su prisión para escribir "Mein Kampf" ("Mi Lucha"), donde expuso su ideología racista, nacionalista, antisemita y anticomunista.

Sus ideas de propagaron en los siguientes años, sobre todo entre los alemanes que sufrían desempleo y pobreza. También recibió apoyo de la gran burguesía, que lo consideraba útil para contener a los comunistas.

Hitler en el poder

Aprovechando su gran popularidad, Hitler postuló a Canciller en marzo de 1932, pero fue derrotado por Hindemburg. Cuando éste murió en 1933, el poder recayó en Hitler, quien se proclamó Führer. A partír de aquí Hitler se dedicó a organizar un Estado de tipo fascista (nacionalista, corporativo y militarizado). Además, impulsó el antisemitismo (odio a los judíos) y el expansionismo pangermanista (doctrina del "espacio vital").

Violando las obligaciones del Tratado de Versalles, Hitler inició una carrera armamentista. En 1936, invadió Renania (región del Rin), y envió tropas al golpista Franco en España. El mismo año firmó pactos con Italia y Japón, formándose "El Eje". En 1938, se anexó Austria y le arrebató los Sudetes a Checoslovaquia. Aunque la agresividad de Hitler era notoria, Francia e Inglaterra mostraban una pasividad que alentaba más al jefe nazi, que ya soñaba con dominar pronto todo el planeta.

La Segunda Guerra Mundial

El 1 de setiembre de 1939, Alemania invadió Polonia y estalló la Segunda Guerra Mundial. Poco después atacó Bélgica, Holanda, Noruega, Dinamarca, Francia e Inglaterra. Mientras tanto Italia atacó Grecia, y Japón bombardeó Hawai de Estados Unidos. El avance de los alemanes fue detenido cuando invadió la Unión Soviética y perdieron en la batalla de Stalingrado (febrero de 1943). En 1944, se produjo el gran desembarco aliado de Normandía, al norte de Francia, que obligó a los nazis a replegarse. En Italia, Musolini fue derrocado, y en el Oceano Pacífico los estadounidenses derrotaban a Japón.

La muerte de Hitler

Cuando los sovieticos ya estaban tomando Berlín Hitler decidió suicidarse. Se mató con su esposa Eva Braun, el 30 de abril de 1945. Él con un disparo, y ella ingiriendo cianuro. Sus cuerpos fueron rociados con gasolina e incinerados por los servidores del dictador nazi.