martes, 22 de abril de 2008
DIVISION DEL MUNDO ENTRE ESPAÑA Y PORTUGAL
El Tratado de Tordesillas (1494)
Por Pablo Macera *
Los viajes y descubrimientos de Colón plantearon un serio conflicto entre Portugal y España. España pretendía que estuvieran bajo su dominio todas las islas, mares y tierras al Occidente del Atlántico.
Portugal a su vez reclamaba el cumplimiento del Tratado de 1481 (anterior a las expediciones de Colón). De acuerdo a ese Tratado pertenecía a Portugal toda la zona al sur de los Azores. Aunque en ésa época nadie en Europa conocía la existencia de América ni lo que había al occidente del Atlántico.
La línea de 1481 resultaba insostenible en 1492 desde el punto de vista de España ante la nueva situación mundial creada por el primer viaje de Colón. Los Reyes Católicos consiguieron que el Papa Alejandro VI (español de nacimiento), expidiera en 1493 unas bulas por las cuales España recibía en concesión las islas recién descubiertas. El Papa compartía entonces las nociones geográficas de su tiempo e ignoraba (como tampoco sabía Colón) que se había encontrado un Nuevo Mundo. Por eso las bulas se refieren a las Islas. El Papa creía que eran de su propiedad las islas al occidente de Europa. De acuerdo a ese principio había otorgado Irlanda al Rey de Inglaterra en el siglo XII y había dado también a Portugal jurisdicción sobre las islas de Madeira, Cabo Verde, y Azores.
La Línea del Papa no fue aceptada por los Reyes Portugueses porque temían que esa Línea pasaba por el medio del Océano y dejaba a Portugal sin tocar isla ni tierra firme.
Por todas esas razones se impuso una negociación directa que incluyó en el Tratado de Tordesillas que permitió a Portugal ocupar legalmente (desde el punto de vista de la legalidad europea) las costas brasileñas de Sudamérica.
En vez de las 100 leguas de la línea papal, Tordesillas fijaba 370 leguas al Occidente de las islas de Cabo Verde como zona de influencia portuguesa. A partir de allí en adelante comenzaba la jurisdicción de España.
Esta línea nunca fue bien recibida por ninguno de los dos países. Hubo duda sobre el modo de contar las leguas (¿marinas, terrestres?. ¿Desde dónde debían contarse?, et.). Fue así como Portugal siguió extendiendo sus dominios en el interior de la Amazonía que teóricamente estaba en la zona española. Mientras que España, a su vez, ocupaba Filipinas durante el siglo XVI, dentro de la zona de influencia portuguesa.
Por Pablo Macera *
Los viajes y descubrimientos de Colón plantearon un serio conflicto entre Portugal y España. España pretendía que estuvieran bajo su dominio todas las islas, mares y tierras al Occidente del Atlántico.
Portugal a su vez reclamaba el cumplimiento del Tratado de 1481 (anterior a las expediciones de Colón). De acuerdo a ese Tratado pertenecía a Portugal toda la zona al sur de los Azores. Aunque en ésa época nadie en Europa conocía la existencia de América ni lo que había al occidente del Atlántico.
La línea de 1481 resultaba insostenible en 1492 desde el punto de vista de España ante la nueva situación mundial creada por el primer viaje de Colón. Los Reyes Católicos consiguieron que el Papa Alejandro VI (español de nacimiento), expidiera en 1493 unas bulas por las cuales España recibía en concesión las islas recién descubiertas. El Papa compartía entonces las nociones geográficas de su tiempo e ignoraba (como tampoco sabía Colón) que se había encontrado un Nuevo Mundo. Por eso las bulas se refieren a las Islas. El Papa creía que eran de su propiedad las islas al occidente de Europa. De acuerdo a ese principio había otorgado Irlanda al Rey de Inglaterra en el siglo XII y había dado también a Portugal jurisdicción sobre las islas de Madeira, Cabo Verde, y Azores.
La Línea del Papa no fue aceptada por los Reyes Portugueses porque temían que esa Línea pasaba por el medio del Océano y dejaba a Portugal sin tocar isla ni tierra firme.
Por todas esas razones se impuso una negociación directa que incluyó en el Tratado de Tordesillas que permitió a Portugal ocupar legalmente (desde el punto de vista de la legalidad europea) las costas brasileñas de Sudamérica.
En vez de las 100 leguas de la línea papal, Tordesillas fijaba 370 leguas al Occidente de las islas de Cabo Verde como zona de influencia portuguesa. A partir de allí en adelante comenzaba la jurisdicción de España.
Esta línea nunca fue bien recibida por ninguno de los dos países. Hubo duda sobre el modo de contar las leguas (¿marinas, terrestres?. ¿Desde dónde debían contarse?, et.). Fue así como Portugal siguió extendiendo sus dominios en el interior de la Amazonía que teóricamente estaba en la zona española. Mientras que España, a su vez, ocupaba Filipinas durante el siglo XVI, dentro de la zona de influencia portuguesa.
* Fuente: Pablo Macera, Historia del Perú 2. La Colonia.