martes, 1 de julio de 2008
EXPOLIACIONES CHILENAS EN LA GUERRA DEL PACÍFICO
Fuente: Renzo Babilonia - Domingo de La República
ENTREVISTA A PATRICIO LYNCH EN 1883
LA POLÍTICA DE LA EXPOLIACIÓN
Una vez terminada la entrevista, y a pesar de la evidente simpatía por el almirante Lynch que profesaba el autor, que era el corresponsal en Lima del New York Herald, se incluye un análisis de la situación en aquel momento de la Guerra del Pacífico en los siguientes términos:
En las tres campañas de Tarapacá, Tacna y Lima ha habido un salvajismo de parte de la soldadesca chilena, que por cierto no reprimió la oficialidad, que era quizás incapaz para reprimir. Algunos de los oficiales la excitaban.
Después de la ocupación de Lima, el sistema de expoliaciones fue perseguido de un modo tan deliberado que legítimamente se puede estigmatizar con el nombre de sistema político.
La desgracia de Chile es que no puede desmentir ese testimonio. Los hechos son demasiado evidentes para cualquier observador. Los están afrontando en los recuerdos militares; los muertos en cada campo de batalla; las desmoronadas murallas de Chorrillos y Miraflores; las salas vaciadas y jardines expoliados de Lima también están afrontando en el rostro de los de Chile… podrían citarse otros muchos ejemplos de expoliación pero los que he citado son suficientes para dar a conocer una faz de esa larga guerra que no honra a los vencedores.
ENTREVISTA A PATRICIO LYNCH EN 1883
LA POLÍTICA DE LA EXPOLIACIÓN
Una vez terminada la entrevista, y a pesar de la evidente simpatía por el almirante Lynch que profesaba el autor, que era el corresponsal en Lima del New York Herald, se incluye un análisis de la situación en aquel momento de la Guerra del Pacífico en los siguientes términos:
En las tres campañas de Tarapacá, Tacna y Lima ha habido un salvajismo de parte de la soldadesca chilena, que por cierto no reprimió la oficialidad, que era quizás incapaz para reprimir. Algunos de los oficiales la excitaban.
Después de la ocupación de Lima, el sistema de expoliaciones fue perseguido de un modo tan deliberado que legítimamente se puede estigmatizar con el nombre de sistema político.
La desgracia de Chile es que no puede desmentir ese testimonio. Los hechos son demasiado evidentes para cualquier observador. Los están afrontando en los recuerdos militares; los muertos en cada campo de batalla; las desmoronadas murallas de Chorrillos y Miraflores; las salas vaciadas y jardines expoliados de Lima también están afrontando en el rostro de los de Chile… podrían citarse otros muchos ejemplos de expoliación pero los que he citado son suficientes para dar a conocer una faz de esa larga guerra que no honra a los vencedores.
Etiquetas: GUERRA CON CHILE, SIGLO XIX